
«ABC» de Sevilla del 10 de mayo de 2001 titula:
«CC.OO. PSOE y CiU piden la reforma de la viudedad».
Se me ocurren varias ideas: se puede ser viudo si se te muere el jefe. O el vecino. O un amigo. Incluso, sin que se mueran. Podría bastar con cabrearte con ellos. Y esto no es más que el principio. Tengo muchas más ideas para reformar la viudedad. Y la orfandad.