Callar de bruces

Está claro que quien fallece calla para siempre. Cuando alguien calla, no se suele especificar la postura, ya que no suele ser lo más importante. Aunque, callar boca abajo parece más forzado ya que lógicamente será más difícil hablar. «El Mundo del País Vasco» del 26 de abril de 2001, da cuenta del fallecimiento de un marinero, y escribe:
«…su cuerpo calló de bruces contra el suelo».
Suponemos que el marinero estaría hablando hasta el último momento, y al final tuvo que callar de bruces.