Policía rompe cabina
«Golpea a un agente cuando rompía una cabina».
Desde luego, ¡hay cada maleducado!. Se trata de un agente de la autoridad y hay que dirigirse a él con respeto: «Por favor, señor agente, deje usted de romper la cabina».
Lo cierto es que, si leemos la noticia, resulta que el que rompía la cabina no era el agente, sino uno que estaba pasado de alcohol y que agredió al agente que lo detenía. Ahora está todo más claro.