
Últimamente las grandes superficies de alimentación están en el punto de mira. Acusaciones como las de tirar alimentos aún en buen estado han minado el prestigio de algunos de estos distribuidores. Pero nosotros hemos descubierto otra de sus tretas: lo que podríamos llamar ofertas nulas o incluso ofertas inversas. Se aprovechan de que muchos consumidores no se detienen en los detalles; si ven un precio tachado y otro sin tachar interpretan que el producto en cuestión está rebajado y que el precio no tachado va a ser, en cierta medida, un chollo. Pero no siempre es así. En el supermercado Eroski de Blas de Otero 54, en Bilbao, nos hemos encontrado con que en la entrada, como aliciente para que los clientes pasen al establecimiento, presentan un cartel en el que dice «+ ahorro cada día. y hoy tenemos». Y seguidamente, figura esta oferta:
«DORADA PIEZA. 1,00 U (es decir´una unidad). 1,90 €». Pero este precio aparece tachado, Y bajo él, en letras rojas, y bastante mayores que las anteriores, leemos: «1’90 €».
Todo un ejemplo que lo que hemos llamado «oferta nula». Pero seguro que hay alguien que, pese a todo, se anima a entrar. Y ya dentro puede encontrar, en la sección de congelados, esta otra oferta «rompedora»:

«CHIPIRÓN FANDICOSTA. 500,00 GR. 3’19 €». Como en el otro caso, este precio está tachado y aparece junto a un cartel en el que dice «aurrezki + egunero» (es decir, lo mismo que en el anterior, pero esta vez en euskera). Y, debajo, el precio con la rebaja inversa: «3,40 €».